1916. El sueño americano se convierte en pesadilla cuando Jack Garron abandona su hogar a la edad de 12 años, en busca de su padre. Durante el camino conocerá el verdadero rostro de Estados Unidos, un rostro dominado por el miedo y el terror, un rostro de un hombre que secuestra y asesina niños con total impunidad por todo el país. Cuando el destino une el camino de Jack Garron con el de este asesino, tendrá lugar una de las historias más terroríficas jamás contadas en un cómic.
Scott Snyder, aclamado autor de DC Comics al frente de Batman o American Vampire, crea aquí su primera obra personal, demostrando que es uno de los mejores escritores del panorama actual. A él se le unen Scott Tuft, en el argumento, y Attila Futaki, en el dibujo, con una narrativa y unas secuencias capaces de mostrar con uno de los trazos más bucólicos que se han visto en años el auténtico mal que anida en el corazón del ser humano.
Scott Snyder.... el chico de moda en Estados Unidos.
La verdad es que últimamente estamos viendo muchas series de este guionista, el cual salta a la fama con American Vampire, que se ha hecho cargo de Batman, y al cual hemos visto también en The Wake.
Scott Snyder es un admirador de un maestro del terror, Stephen King, y en esta obra se nota y mucho, repasemos:
En esta historia vemos como un niño adoptado tiene el sueño de conocer a su padre, y como suele ser habitual en estos casos, se crea una imagen idílica:
Su padre es un músico muy bueno, lleva una vida de la hostia, es guay, y no, la realidad es que su padre seguramente sea un borracho que toca en garitos de mala muerte y que por no saber no sabe ni que tiene un hijo, pero lo peor de todo es que ese sueño de un hijo de encontrarse con su padre se acaba convirtiendo en una pesadilla.
La historia nos muestra un viaje por la américa profunda, trenes de mercancías en donde la gente se sube de hurtadillas, las carreteras semi abandonadas , lo mismo te encuentras a cuatro palurdos destilando whisky que matando un cerdo.
Tabernas de mala muerte, prostitutas de 13 años, parajes inquitetantes y lo peor, las malas compañias que te puedes encontrar en el camino.
Estamos en la segunda mitad del siglo XX y la gente todavía cree en el sueño americano.
Jack Garron, nuestro protagonista, se ve completamente indefenso cuando sale a conocer mundo, y conoce gente, algunos malos y otros peores, pero en todo caso interesantes, eso no lo podemos negar.
Cuando eres pequeño eres inocente, vulnerable, pero a fuerza de llevarte hostias te espabilas, y eso es lo que vemos en esta historia:
Un señor amable, tal vez demasiado, ayuda a Jack a encontrar a su padre, pero las cosas no son lo que parecen......
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| No es bueno fiarse de un desconocido. |
No os cuento más por que es algo que hay que leerse, eso si, aviso que es inquitante, da miedo, la historia tiene un par de giros buenísimos y el otro protagonista de nuestra historia parece, efectivamente, sacado de una de las mejores novelas de Stephen King.
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