viernes, 9 de mayo de 2014

Manuel Gago. Alberto España.

Este mes he tenido la oportunidad de poder leer esta colección de Manuel Gago.
Es la típica serie que en principio no te haces ilusiones de tener entre las manos pero mira tu por donde, se ha puesto a tiro.

Alberto España y su perro Nick, es el título completo, es un serial de siete cuadernillos publicado por la Editorial Valenciana en el año 1943.



Los cuadernillos se componen de 8 páginas mas 2 o incluso 3 complementarias con una historieta de humor ambientada en el mundo del boxeo.

Argumento: El protagonista de la serie es Alberto España, hijo de Carlos España, propietario de un circo, el cual ha pedido un préstamo a uno de sus empleados para financiar los estudios de su hijo.
Este empleado resulta ser el malo de la serie, Antoni, domador de leones con unas motivaciones bastante simples, quiere el circo y la mano de Cleo, hija de otro trabajador del circo.
Para hacerse con el circo y casarse con la protagonista femenina de la serie recurre a todo tipo de artimañas.
Aunque la serie está ambientada en el mundo del circo, en realidad parece más una serie policiaca, ambientada en paisajes urbanos, con persecuciones, intrigas y personajes bastante estereotipados.

El interés de la serie, bajo mi punto de vista, se encuentra en observar como Manuel Gago ha evolucionado de una forma meteórica en su dibujo, para lo cual vamos a poner varias portadas y viñetas de series anteriores como Viriato o el Niño Gonzalo.


Viriato y la Destrucción de Numancia es un cuadernillo editado en 1943 por la editorial Hispanoamericana, el primer trabajo de Gago. Una serie que tuvo la intención de contar episodios históricos patrios sin ningún tipo de rigor histórico ni por supuesto objetividad alguna.
En este cuadernillo, Viriato y los "nacionales", ponen en jaque a todo el ejército romano, romanos con trajes de pastores, dicho sea de paso y enlaza la muerte de Viriato con el episodio de la destrucción de Numancia.
Estamos ante un dibujante completamente inexperto el cual no ha recibido ningún tipo de formación.


Posteriormente tenemos la serie del Niño Gonzalo, de la que ya hemos hablado anteriormente en este blog.
Aquí la evolución del dibujante es evidente, ya que del estilo del número 1 al último hay una evolución notable.


Viendo la portada, el dibujo es mucho mejor que en Viriato, pero todavía le falta.

Ahora vamos a la serie de Alberto España, y aquí ya se ven detalles que luego se certifican en el Guerrero del Antifaz o en el Pequeño Luchador.
Antoni, el domador de leones, es igual que Jack, el jefe de la colonia, por ejemplo: los dibujos tienen trazos muy finos y las figuras están mucho mejor proporcionadas.


Si observamos la fecha de publicación de Viriato, vemos que ha pasado entre año y medio y dos años, siendo los dibujos mucho mejores.

Pues nada, en breve seguiremos informando de series raras y antiguas.

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